En nuestro colegio hay una gran tradición de Carnaval. Todas y todos recordamos venir disfrazados, ilusionados y con mucha gana de fiesta para llenar el día de risas y muy buen ambiente. El desfile que hacemos siempre en las inmediaciones del centro es digno de ver. Todo el mundo listo para ver a una chavalería alegre y dispuesta a llenar de color la Avda. Castelao.
Pero este año es distinto. No habrá desfile y no habrá contacto con el barrio, que era lo que nos gustaba. La situación sanitaria nos exige ser muy cautelosos y todas las actividades serán en el colegio y con grupos estables para evitar contactos. Podríamos, con razón, decir que es un fastidio, que no mola tanto, que ya no hay carnaval en nuestro cole, pero si te paras a pensar un poquito, y como medida para ir en contra de este maldito virus, debemos afrontar la fiesta con aún más ilusión. Habrá concurso de disfraces, habrá película documental para aprender más sobre nuestra fiesta y nuestra etnografía… en definitiva, pararemos un poco para saber y entender más sobre nuestra fiesta. Serán unha fiestas reflexivas para aprovechar aún más todo lo bueno que tiene el carnaval gallego. A veces, hay que dar un paso atrás para coger carrerilla y dar unos cuantos pasos más hacia adelante. Pues este año toca preparar ese impulso. En el futuro, gracias a esta experiencia, no sólo lo pasaremos mejor, sino que lo haremos más conscientes de lo que significa y, por lo tanto, lo disfrutaremos más.
